“Fue una experiencia como madre. Era como el tiempo de volver a la música, yo tenía tiempo libre para ver crecer a mis hijos, tengo dos hijos, uno de 9 años y otro de 8 años, y ellos se sienten muy orgullosos de su mamá. Pero, lo más importante es que Dios me dio la oportunidad y el camino de este disco y con este disco yo quería comunicar lo que Dios está haciendo en mi vida, en nuestra vida como familia. Y también creo que es necesario caminar en una actitud de alabanza y adoración, y este disco es un reflejo de eso”, dijo la cantante.
Ella también habló sobre la persecución religiosa que se vive en el mundo hoy en día tras su participación en el filme “I’m Not Ashamed”.